Sobre los camellos
van por el camino
los tres Reyes Magos
para ver al Niño.
Cruzando el desierto
paran a comer
área de servicio
de la Duna Diez
Los tres han pedido
el menú del día
y hacen un descanso
en la travesía.
¡Qué buena comida!
¡Todo está muy rico!
Relamen los platos
con gran apetito
Siguen adelante
caminando, alegres,
con los tres regalos
que van a ofrecerle.
Oro, incienso y mirra
llevan al Portal.
Le parece poco
al buen Baltasar.
Por eso, en su manto
el Rey negro esconde,
para darle al Niño,
el flan de su postre.